El futuro de Wayne Rooney está cada vez más lejos de Old Trafford. el delantero sufre el mismo virus que en su día afectó a otros cracks del Manchester United como David Beckham, Ruud van Nistelrooy o Cristiano Ronaldo. Un virus con nombre y apellido: Alex Ferguson.
El divorcio entre el ariete y el entrenador es un secreto a voces en Inglaterra, donde los medios se hacen eco casi a diario de los desencuentros entre ambos. Rooney está harto de Ferguson y se niega a ampliar su relación contractual con el Manchester United, la cual expira el 30 de junio de 2012.
Con el futbolista declarado en rebeldía y sin intención de renovar, los rectores del club inglés sopesan seriamente la opción de traspasar al '10'. Es más, si pudieran, negociarían su salida durante el próximo mercado de invierno, pero el hecho de que no pueda jugar en la Liga de Campeones al haberlo hecho ya con el Manchester United hace inviable la operación.
La situación variará en verano, ya que si todo continúa como hasta ahora, Rooney tendrá abierta de par en par la puerta de salida de Old Trafford. Y es que será la última oportunidad que tendrá el Manchester United para hacer caja con su traspaso, como en agosto sucedió con Mesut Özil y el Werder Bremen.
Si finalemte el United pone a la venta a Rooney, el Real Madrid no será el único club que intente fichar a un jugador que la semana que viene cumplirá 25 años y que goza de un gran cartel en Europa. A favor de la entidad de Chamartín habría que tener en cuenta que Lassana Diarra y Karim Benzema son dos jugadores del agrado de Ferguson y podrían formar parte de la operación si continúan sin entrar demasiado en los planes de José Mourinho.
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