"Me da pena irme del Betis". Esta madrugada, las redes sociales propagaron al fin la esperada noticia: Emaná dejaba de ser del Betis. El propio futbolista utilizó sus perfiles para colgar un par de fotos de la firma de su nuevo contrato con el Al-Hilal, estampada en el salón de un hotel de París, hasta donde Emaná había viajado para pasar el examen médico con el club árabe. Junto a ellas, su adiós: "Me voy a una aventura que me hace mucha ilusión", añadió.
Se acaba así -anoche quedaba aún por cierto que el Betis lo oficializase también- un culebrón que ya se había alargado durante dos semanas y que había obstaculizado peligrosamente la planificación del Betis de Primera, supeditada como se sabe a que se concretase la venta de su estrella. Una vez conseguida, el club verdiblanco ya dispone de dinero para traer los fichajes que Mel viene pidiendo desde hace tiempo: delantero, centrocampista y lateral.
Los 4,7 millones de euros recaudados por este traspaso deben tener inmediato destino. Zigic (Birmingham) y Valdez son los dos nombres que el Betis ha manejado en los últimos días, aunque ya se sabe de momento que el segundo también negocia con el Getafe. Para el lateral parece la opción de repescar a Miguel Lopes la más viable. En cualquier caso, el Betis tiene desde hoy diez días para armarse de cara al derbi con el Sevilla.
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